Del Amor Y Del Deseo
Pon tu luenga boca de secano en mi ribera
Azucena dorada que das luz a las gacelas del olvidoY dibujas con olor de primavera,
Lugares soñados por los enamorados en la noche.
¿No adviertes mi presencia, rocín de sangre?
¿Ni recuerdas como apenas tembloroso
Recorrías mi cuerpo perseguido por el rayo de la mañana?
Corrías por las dunas y los hombros sensuales,
De gesto noble y severa incertidumbre.
Corrías como aquel muchacho atravesado por un rayo de luna.
Amor sórdido de hombre, savia cálida
De cálidos abrazos cobrizos y sinuosos.
Fuerte tacto en un lecho de azucena.
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por participar y/u opinar en mi blog.
100% Poesía (Derechos de Autor Reservados)